Enfoque paliativista respecto a un caso clínico con angiosarcoma cardíaco.

Pablo Alessandro Garibaldi Tolmos
Jean Carlo Heredia Pons
Eva María Nieto Ramos.

Complex Assistencial de la Santa Creu. Jesús-Tortosa

Introducción

El angiosarcoma cardíaco (AC) es una patología de pronóstico desfavorable con sintomatología compatible con un cuadro constitucional, que lleva a diagnósticos tardíos con metástasis concomitantes en etapas avanzadas de la enfermedad. Si bien una estrategia multidisciplinar mostraría resultados esperanzadores en el futuro, la mayoría de pacientes requieren aún un enfoque de tratamiento paliativista.

Objetivos

Exponer la historia de una paciente con AC, resaltando la importancia de un manejo paliativo integral.

Caso reportado

Valoramos a una mujer de 65 años por astenia y disnea progresivas, y un examen físico anodino. Un ECG muestra ondas T negativas de V1-V4, DIII y AVF y aplanada en DII, con una analítica sin alteraciones significativas.

Tras una ergometría donde presentó un presíncope por hipotensión, la ecocardiografía transtorácica mostró un derrame periauricular derecho, y una resonancia magnética que evidenció una masa compatible con un AC.

Luego de ser desestimado un tratamiento oncoespecífico, es derivada a la unidad de cuidados paliativos, iniciando un enfoque integral centrado en el aspecto físico, psicoafectivo, espiritual y socio familiar. Se realizó inicialmente una optimización del tratamiento mejorando su estabilidad clínica (disnea, estreñimiento pertinaz, hiporexia, insomnio, astenia, ansiedad, depresión, etc.); lo que permite el desarrollo de  una comunicación abierta con la paciente y familiares, aportando la información que incluya pronóstico y las expectativas de manejo a los mismos.

La progresión de la enfermedad lleva finalmente a reconocer la situación de últimas horas tras una nueva descompensación general, iniciando así la sedación paliativa.

Angiotomografía computarizada de tórax con lesión sólida extensa (flecha transparente), con refuerzo heterogéneo con contraste.
Evidencia infiltración difusa de la pared de la aurícula derecha y reducción de la luz, compresión de la vena cava superior aún permeable (flecha blanca).
Las imágenes sugieren una afección maligna

Discusión

Mas allá del avance de la medicina en muchos campos que incluyen estrategias multidisciplinares (Cirugía, quimioterapia, inmunoterapia y radioterapia); y pruebas de imagen preoperatorias (Ecocardiograma transesofágico y transtorácica, la tomografía computarizada con el estadiaje, la resonancia magnética con la caracterización e infiltración de la masa, el angiografía coronaria con los vasos nutricios del tumor, y TC-PET para tumores secundarios metastásicos) y métodos diagnósticos complementarios postoperatorios (Estudios histopatológicos como biopsia transvenosa, estudios de inmunohistoquímica y la citogenética), el pronóstico del angiosarcoma cardiaco sigue siendo funesto.

La mayoría de pacientes requerirán un enfoque de tratamiento paliativo para el control de síntomas "a priori" refractarios al tratamiento o enfoque medico habitual permitiendo acompañar al paciente en las diferentes etapas de evolución de su enfermedad.

Esto implica la necesidad de una evaluación interdisciplinar, completa y continua a lo largo del tiempo, tanto de las necesidades físicas y psicológicas del enfermo como de su entorno familiar.

Conclusiones

Los cuidados paliativos constituyen la forma más adecuada de atención al paciente con cáncer en fase terminal y familiares, siendo fundamental el continuar mejorando la calidad de los cuidados en momentos finales de la vida, debiendo formar parte de todo proceso asistencial.

Es pieza clave reconocer la fase terminal de la vida, con síntomas irreversibles y refractarios que deberán ser controlados.

Es nuestra misión acompañar al paciente y familiares en el camino hacia la muerte, otorgándoles toda la dignidad posible.